lunes, 12 de octubre de 2009

Mañana





Se que todo acabara mañana. Abriré los ojos y estaré una vez más en manos de la realidad tirana y mezquina.
Mañana que aun no llega pero ya comienza a torturarme.
Es tan sencillo acostumbrarse a tu ternura, deslizarme en tus contornos y caber a la perfección. Ser parte de tus partes y no evitar querer ser dueño de todo.
Como serán esos mañanas sin tus manos acomodando mis ideas perdidas. Como voy abrigar el costado que dejaras desnudo.
Mis palabras una a una se van desangrando.
De que lugar sacare esas fuerzas para sobrevivir a noches en que no pueda quedarme en mi cuerpo.
Mañana viviré como se pueda y como deba.
Ahora en lo inmediato se que estas cantando bajito una canción que detesto pero que ya casi se convierte en mi favorita, que vas y venís como si persiguieras algo que se escabulle de tus ojos. Que me hablas de mil cosas y de quien sabe cuanta gente todo eso en un minuto como si el tiempo te fuera pisando los talones. Te miro, mucho y hasta eso me parece insuficiente.
Soy fan de tu honestidad brutal. De tus abrazos espontáneos. De tus palabras extras.
Te miro y se que te daría todo lo que soy, porque se que todos mis pedazos de hombre caben en tus manos y todos tus trocitos de mujer caben en las mías.
Que importa lo que pasará mañana cuando esta noche se que te tendré conmigo.

domingo, 2 de agosto de 2009

Trabajo.


Trabajo


Observo todo a través del cristal y no logro ver absolutamente nada.
Esta todo aquello, las torres de cemento, ventanitas, puertas, balcones, antenas.
El cielo limpio y azul como un tapiz decorándolo todo.
Un ave. Un puñado de hojas. Calles.
El frío instalado bajo las huellas de algunos transeúntes.
Un globo. Un niño llevándolo consigo. La niñez y su inocencia.
Una pareja. El intento. La esperanza. Los sueños. Las promesas. El amor que los entrelaza.
Observo todo a través del cristal pero me cuesta trabajo ver, apreciar, creer, sentir, esperar, desear y saborear todo lo que me rodea si no estas vos para compartir un instante.
Es fácil ver la ciudad que gira. Florece. Marchita. Y vuelve a la vida.
Lo difícil es hacerlo solo sabiéndote mía y lejana.

domingo, 19 de julio de 2009

Mensajes Salvadores




El sonido del celular me dio a entender que eras vos.




Estoy en la cima.



Conociéndote y conociéndome estabas parada en el lugar donde una vez nos sentamos a ver la ciudad.
Quiero estar con vos pensé.
Escapar de toda esta locura y solo permanecer en tu compañía. Mirarte hasta que mis ojos no puedan más y vos te sientas incomoda. Y me evadas como de costumbre. Sentirme libre de hablar de todo lo que nunca digo a nadie. Apoyarme en tu hombro como un pibe caprichoso y pedirte que me des un poquito más de lo que siempre me das. Jugar a ver el final de la avenida. Elegir para que extremo bajar. Quiero estar ahí, prendido a tu cintura. Abrasándote disimuladamente sintiéndome seguro de mi.
Estoy en la cima. (me escribiste)
Yo disimulando pregunte cual.
ESA misma ..y quisiera estar con vos.
Creí que el mundo se partía a mis pies.
Me llevaste a la cima en con solo cuatro palabras.

viernes, 3 de julio de 2009

maratón

(zzzz... al menos duermo bien virtualmente)

Al igual que muchos esta semana se nos han planteada complicadas.
Relegamos actividades habituales para avocarnos a esta crisis sanitaria que hoy afecta al país.
Le he sido infiel a mi cama, con las sillas, cinco minutos en el escritorio. Apoyado en la pared.
Absorbí el cansancio hasta hacerlo una capa gruesa insoportable en mi espalda, pies, ojos, mente, espíritu.
Dentro de unas horitas se acabara mi recreo de veinticuatro horas para volver a ser devorado por las garras de esta gripe.
Nota: en unos días visito sus respectivos blogs hoy ya no llego.
saludos Andres

lunes, 15 de junio de 2009

sabor saber


Sabía que eran inpuntuales, tus besos,
y aun así no me canse de esperarlos.
Sabía que caer en ellos, tus labios,
me atarían al puerto del deseo.
y aun así me amarre a él sin dudarlo.
Sabía que eran tiernas, tu manos,
lo que me sorprendió es que guardaran magia.
Sabía que tu cuerpo me anudaría a vos porfiadamente
Sabía del aroma de tu piel
por eso buscaba impregnármelo
para saber a vos las veinticuatro horas
del día.

miércoles, 27 de mayo de 2009

Fríos internos




Hace frío, en mi vida hay muchas ventanas abiertas o puertas mal cerradas.
Mis huesos sangran. Mi piel se quiebra.
Mi corazón vive sin latir.
Mi pulso retumba pero esta detenido.
Mis ojos ven lo mismo todo el tiempo.
Mis pies caminan lento.
Mis pensamientos lloran.
Mis labios de marchitan.
Mis caricias mueren.
Mis venas transportan toxinas resignadas.
Soy un río que no encuentra donde desembocar
y se seca.
se pierde entre las grietas de los días.
Mi vida esta tiritando,
yace a los pies de tu partida.

martes, 19 de mayo de 2009

Divergencias.


Hoy o mañana.
Tarde o temprano
De noche o día
A gritos o en silencio
A medias o a cuerpo entero.
En soledad o mal acompañado.
Con o sin mi
Con o sin vos
Para estar solo o en tu compañía
Para terminar de reventarme o de levantarme.
Cerca de tu norte o hundiéndome en mi sur.
A medias piezas o sin ellas
Para terminar de llorar o comenzar a reír
Para comenzar trascender o para terminar de olvidar.
De tu mano o apartado de ella.
Abrazado a tu sonrisa o extirpado de ella
Amándote o desmontándote de mi
Así estoy
descuartizando mi amor por partes
dispersándolo lejos muy lejos
de mi
o de aquí.

domingo, 17 de mayo de 2009

ELLA.


ELLA.

Ella es luz.
Penumbra
Ocaso y amanecer.
Es una calle desierta.
Un miedo feliz
La punta de una espina.

Ella es azar.
Es perfume a lavanda.
Un conjunto de improbabilidades.
Un callejón. Una salida.
Es descanso.

Ella es simpleza
Es tormenta. Remolino.
Calma
Tempestad.
Ella es un buen desorden.

Ella es mujer
Rocio
Deseo
Placer
Convicción
Perdición
Ella es amor,

mi amor.

jueves, 14 de mayo de 2009

Ya ni ellas




Las encontré armando sus valijas. Ellas también me dejaban, las ultimas dos.
Vagaban como desequilibradas, desorientadas sin mirarse entre si. Sus ojos se apagaban.
Se sentaron frente a mi, como esperando, algo.
Mi voz exclamo una queja. Detuve la vista en el suelo y entonces senti ese fin que rompe con las ilusiones.
Quede vació hasta las ultimas de mis esperanzas acababan de partir

martes, 12 de mayo de 2009

Sentimientos fríos


En mañanas frías mi Buenos Aires no siempre es tan querida.
el subte, los boletos, las monedas, el retraso, los carteles.
El zigzag humano, los autos, el eco de los edificios.
Caras distintas que son casi un recurrente
Y esa molestia de ver y sentir lo mismo de siempre.
El entumecimiento persistente de tu nombre en mi boca
Logra desenamorarme de las callecitas de esta mi Buenos Aires querida.

domingo, 10 de mayo de 2009

Lista





Tengo ceniceros colmados de esperas.
Percheros atiborrados de tiempos viejos.
Soledades de varias tallas.
Una almohada que ya no me soporta.
Una pila de diarios con noticias inservibles.
Un clasificado al que nadie acude.
Un trabajo.
Horas ocupadas.
Paisajes tan iguales.
Cansancios adoloridos.
Una espalda a la miseria.
Una ventana que necesita una caricia.
Dos manos que no se miran.
Un reflejo que desconozco.
Una heladera desocupada.
Tres arrugas nuevas.
Cuentas que pagar.
Dinero que gastar
Suspiros que liberar.
Canciones por aprender.
Tengo tanto.

tanto vacío sin vos.

domingo, 19 de abril de 2009

Ojos a tu acecho


Intriga

Aparecerás por mi izquierda o por mi derecha.
¿Sabré que sos vos? ¿Sabrás que soy yo?

¿Caminaras como perdida al igual que yo?
Buscaras algo que nunca perdiste, pero que extrañamente sabes que es tuyo.

¿Serás mía? ¿Seré tuyo?
No la pertenencia que da dueños sino la pertenencia que te brinda libertad.

¿Abrirás la puerta? O ¿te encontraré sin previo aviso detrás de una?

Intrigas que hace que mire ambos lados y no solo al cruzar la calle.

jueves, 16 de abril de 2009

Busquedas

Presiento


Te presiento


Estoy cerca


Estas cerca


Voy camino a tu encuentro

solo

ENCUÉNTRAME


lunes, 6 de abril de 2009

Se cuentan mis días.


Envejecen, mis días y yo con ellos.
Agoniza, mi amor y yo con él.
El negro color de la soledad vuelve a mis ojos
Rasguño miserias
Deseos
Suplicas
Mendigo tu cuerpo
Se apaga mi fuego
Se despellejan mis manos
Hay suicidio masivo de besos perdidos
El amor se tira por la borda
Me abandona
Y aun así
El hilo de mi voz sostiene tu nombre.

domingo, 22 de marzo de 2009

Libre


“bicho de ciudad” cantan los Piojos, así me siento al verme devorado por este cielo colosal.
El silencio de las callecitas de tierra te atormentan al principio.
Aun traigo el apuro propio de las ajetreadas tardes porteñas, caminando dos pasos en uno y realmente no se porque, costumbre, inercia, rutina.
Recién pasados unos días logre que mis ojos se despertaran después de la hora en que suena la alarma en mis días laborales.
Me fascina sentarme a desayunar cerca de la ventana, observar a las mujeres desarropadas de tanto maquillaje, libres y auténticamente sonrientes.


“…respiro hondo y tomo el vino
No te asustes si grito como un loco,
Es necesario que a veces sea así
Será la vida que siempre nos pega un poco
Nos encandila con lo que esta por venir…”



Es costumbre sentirme un poco ajeno a este tipo de lugares. Formo parte de los apurados de aquellos que caminan o pretende ir varios pasos antes que el horario.
Salir pensando que llegas tarde. frustrado al ver que no llegas a horario al subte, ideas combinaciones raras colectivo, escaleras mecánicas, tren. A eso le llamamos vivir.
¡Que ironía!
Las grandes urbes tienen eso. Mal vivir.

Descanso. Vacaciones. Desarreglo en horarios.
Podría afirmar que la monstruosidad que me socavaba la tengo casi comiendo de mi mano.

lunes, 9 de marzo de 2009

Historia











Blancas y negras. Teclas. Música. Partituras viejas. Temas que se de memoria.
Acaricio levemente mi viejo piano. Desde pequeño me sentí identificado con la música, recopile cajas de casetes, rescate una guitarra que era de mi abuelo y que nadie parecía prestarle atención. Aprendí a tocarla torpemente a través de los veranos, recuerdo que ella fue la primera que me enseño que significa la palabra nostalgia. Cuando pude la hice mía y era la compañera infaltable en las reuniones entre amigos.
No recuerdo que fue lo que sucedió para que el piano llegara a casa. Supongo que era la nostalgia de mi papá, un sueño que pudo tocar con sus dedos.
Debo reconocer que supe apreciar toda su grandeza cuando fui más grande. A veces me desafiaba queriendo sacar alguna canción y un día me di cuenta que lograba transportarme de una forma única.
El piano sigue teniendo el mismo dueño, yo lo tengo en forma de préstamo.
Si logras subirlo sin que tenga un rayón podes conservarlo un tiempo –me dijo él-
Y acá esta. Me siento. Cierro los ojos y solo me dejo llevar.
Estos son mis dos amores que siempre van conmigo.
Mi guitarra y el piano (casi mio)


Mis vacaciones por fin arribaron a casa, me restan solo unas horas para tomar un poco de respiro de estas paredes que no hace otra cosa que preguntar por ella.

lunes, 2 de marzo de 2009

sin salida


Cerré la puerta temprano, le di doble vuelta a la llave. Y salí.
Escape del domingo que me preparaba desayuno.
Afuera todo parece menos abrumador. Afuera soy uno más que camina creyendo saber donde va. Soy ese que finge ante la moza del café que disfruto de una mesa para uno.
Las aceras son un buen lugar para los perdidos, son solidarias y hacen de sus adoquines senderos sin marcar.
Pero aunque le haga los desprecios más inmensos a este día, hay domingo a carretillas llenas.
Domingo, escape tanto como pude de ese dormir hasta tarde, quedarme entre las paredes tan calladas solo me recordarían que ya no tendría mas migas entre sabanas, ni el diario desparramado una hoja en cada sala, escape para no ver como echa rices tu ausencia.
De lo que no me di cuenta que esté día va conmigo a cuestas y no puedo ocultarme ni perderme de él doblando alguna esquina.
Es algo común supongo dar estos manotazos de ahogado, creer que alejándose unas horas o unos metros algo se detendrá, nada se detiene porque no hay manera de escapar por esa razón tan simple que es que del cuerpo y sus memorias no hay forma de abrir la puerta.
el cuerpo da vueltas ciegas sobre lo mismo aunque salgas temprano y escapes de un domingo temprano y le des doble vuelta a la llave.

sábado, 28 de febrero de 2009

Sexto piso,soledad.


El ascensor me deja a los pies del sexto piso, llegar a casa sabiendo que nadie espera que no ya no tengo a quien esperar.
Y soy como un viento pesado que no puede echarse a volar y olvido como ser brisa ligera . Un grito de soledad aglomerada. De cuartos vacíos. De valijas llenas. De cajones revueltos desordenados llenos de nada.
Una llave a la que ya no la quieren.
Un par de libros olvidados.
Es que ya no estas. Ya no vas a volver.
Volveremos a ser solo uno, YO y mi apático ser.
Cuando abro la puerta de casa siento que la vida me atropella
.

viernes, 27 de febrero de 2009

amanecer


El sol, la ventana, las persianas, la mañana y mi costumbre cotidiana DESAYUNARTE.
Verte ahí zabullida en tus sueños con tu carita perdida entre tus cabellos negros. Tus piernas que se dejan entrever entre el traslucir de las sabanas. Verte .
No te despiertes. No me dejes a mitad de mi banquete.
tus manos perdidas debajo de la almohada. Tu espalda es atrevida, me mira, me llama, y voy, me detengo, sigo tu forma.
El sol, la ventana, el reloj, la mañana y mi costumbre cotidiana .DESAYUNARTE.

sábado, 21 de febrero de 2009

Decis Digo




Digo, te digo, te rodeo de palabras, tanto en voz alta como en silencio.

Yo no digo vos hablas, de la tormenta, del calor y la humedad. De que tus uñas nunca crecen. Me preguntas cien veces si te queda bien tu pollera blanca cien veces y más si es necesario te digo que sí, aun sabiendo que vas a terminar poniéndote la misma que descartaste porque odias su color, por las flores bordadas, el largo y su insulsez aunque ahora parece perfecta, ideal y te ves al espejo con esa carita de gran vencedora.
Si supieras que mientras vos hablas yo maleducadamente te interrumpo con la mente
y te digo :

Me gustas vos y esas varias que te habitan.
Me agradan tus ojos abiertos y cerrados.
Tu pelo revuelto y alocado.
Tus labios con o sin color.
La fragancia de tu cuerpo mientras soñas.
Tus uñas cortas. Tus dietas y sus verduras.
Subrayo, afirmo , confieso, recalco
Que te quiero.
Y
Que sos la culpable de esto que soy.
Que aunque no estés te llevo conmigo.
Que en vos nacen mis deseos y esperanzas.



Imprevistamente ni vos ni yo decimos nada, Vos asomas tu cabeza por el marco de la puerta, acomodas tus ojos de una manera inexplicable tentadora irresistible
Y me decís …¡SABIAS QUE TE QUIERO ¡
y me quedo sin palabras tanto en voz alta como en silencio.

miércoles, 21 de enero de 2009

lectura




EN TI ME QUEDO

De vuelta de una gloria inexistente,
después de haber avanzado un paso hacia ella,
retrocedo a velocidad indecible,
alegre casi como quien dobla la esquina de la
calle donde hay una reyerta,
llorando avergonzado como el adolescente
hijo de viuda sexagenaria y pobre
expulsado de la escuela vespertina en la que era becario.
Estoy aquí,
donde yo siempre estuve,
donde apenas hay sitio para mantenerse erguido.

La soledad es un farol certeramente apedreado:
sobre ella me apoyo.

La esperanza es el quicio de una puerta
de la casa que fue desarraigada
de sus cimientos por los huracanes:
quicio-resquicio por donde entro y salgo
cuando paso del nunca (me quisiste) al todavía (te odio),
del tampoco (me escuchas) al también (yo me callo),
del todo (me hace daño) al nada (me lastima).

No importa, sin embargo.

Los aviones de propulsión a chorro salvan rápidamente
la distancia que separa Tokio de Copenhague,
pero con más rapidez todavía
me desplazo yo a un punto situado a diez centímetros
de mí mismo,
de prisa,
muy de prisa,
en un abrir y cerrar de ojos,
en sólo una diezmilésima de segundo,
lo cual supone una velocidad media de setenta kilómetros a la hora,
que me permite,
si mis cálculos son correctos,
estar en este instante aquí,
después mucho más lejos,
mañana en un lugar sito a casi mil millas,
dentro de una semana en cualquier parte
de la esfera terrestre,
por alejada que os parezca ahora.
Consciente de esa circunstancia,
en muchas ocasiones emprendo largos viajes;
pero apenas me desplazo unos milímetros
hacia los destinos más remotos,
la nostalgia me muerde las entrañas,
y regreso a mi posición primera
alegre y triste a un tiempo
-como dije al principio:
alegre,
porque sé que tú eres mi patria,
amor mío;
y triste,
porque toda patria, para los que la amamos,
- de acuerdo con mi personal experiencia de la patria-
tiene también bastante de presidio.

Así,
en ti me quedo,
paseo largamente tus piernas y tus brazos,
asciendo hasta tu boca, me asomo
al borde de tus ojos,
doy la vuelta a tu cuello,
desciendo por tu espalda,
cambio de ruta para recorrer tus caderas,
vuelvo a empezar de nuevo,
descansando en tu costado,
miro pasar las nubes sobre tus labios rojos,
digo adiós a los pájaros que cruzan por tu frente,
y si cierras los ojos cierro también los míos,
y me duermo a tu sombra como si siempre fuera
verano,
amor,
pensando vagamente
en el mundo inquietante
que se extiende -imposible- detrás de tu sonrisa.

(Angel González)

domingo, 18 de enero de 2009

recuerdo



Lo primero que recuerdo de vos
Es que no te recordé.
Sonreíste. Esperaste
Y aun así no te recordé
Lo primero que recuerdo de mi
Sin vos
Es que era un ciego con buena vista

martes, 13 de enero de 2009

Esperas que desesperan


El sillón cruje, la tele habla y habla , el diario minuto a minuto que pasa pierde la frescura de su contenido, el techo, el suelo, la esquina de la pared, la brisa, yo.
La casa parece un gran caserón triste, sombrío, repugnante cuando tu sonrisa no la habita. Todo se vuelve inhóspito, desértico, estéril , volátil si vos no estas en ella.
Podría para disimular decirte que la única planta que tenemos perdió su verde por tu tardaza, que el desayuno se convirtió en cena esperando que ocuparas el lugar en la mesa, que la radio canto histéricamente sola sin vos como compañía, podría, claro que podría poner e inventar un sinnúmero de excusas para disimular mi necesidad de tu presencia.
De a ratos le temo a este amor , te temo a vos, a que un día me prives de todo esto.
Las llaves, la puerta, tu voz, un primer beso, un segundo mas dulce que su antecesor, varias sonrisas en una, tus zapatillas perdidas por ahí, un alivio, un te extrañe!, una mirada , una respuesta YO MÁS!
.

lunes, 12 de enero de 2009

pasado y presente


Uno o dos días a la semana me toca ser amable conmigo mismo soy mi único compañero. Puedo decir que a veces me desconozco un poco al verme, me veo feliz, completo, resuelto, calmo cosa que no fue muy habitual en mi persona.
Quien me conoce, lo suficiente, sabrá que soy un tanto escueto de palabras, adorador de las tardes con las ventanas abiertas y cortinas que intentan salir a volar, que hablo y mucho pero con mi piano, que guardo y resguardo mis amistades pero ante todo siempre me caracterice por ser un “perro” solitario, sin pretensiones de hacer raíces en ninguna parte en especial, egoísta ,si, puede que se vea de ese modo aunque les diré que es tan solo una manera lastimera y controversial de no salir siempre por la puerta de atrás cantando bajito.
Recuerdo que hasta algunos meses atrás pasaba más horas trabajando que viviendo creo que había por muchos motivos optado por no mirar para los costados.
La soledad créanme que a veces lastima menos que algunas palabras o que un ultimo portazo.
Al principio de este texto dije que uno o dos días de la semana me toca ser amable conmigo mismo es cuando me quedo de guardia y dialogo con todo mi pasado y me delito con todo mi presente. Un presente que la tiene a ella.
Ella que hace de mi vida un lugar digno de saborear.

domingo, 11 de enero de 2009

Desayunandote


mientras cierro mis ojos no queriendo despertar
vos;
Mientras enjuago mi cara por las mañanas
vos;
mientras despierto
vos;
mientras veo girar el agua al sentido de las agujas del reloj
vos;
mientras me desencuentro con eso que busco
vos;
mientras preparo mi lista de prioridades diarias
vos;
mientras tomo pausadamente mi café apoyado en la cómoda
vos atrincherada en nuestra cama, envuelta entre las sabanas , sometida a tus sueños
y yo disfruto mas de vos que de mi café

sábado, 10 de enero de 2009

Mis mal llamados secretos


Secretos

Se que a veces al mirarnos detenidamente algo nos asusta, algo que puede que vea en tus ojos o el temor que veas algo en los míos.
Secretos, encajonados en la mirada, preguntas, inseguridades.
Me incomoda de a ratos tu mirada inquisidora amenazándome queriendo descubrir lo único que todavía no me atrevo hacerte participe esos mal llamados secretos que solo son temores.
Temor a verme otra vez perdido y solo. A perderte. A que te pierdas en la próxima esquina. A que no abras la puerta a las 20:50. A levantarme una mañana y sentir el `piso frío por la ausencia de tus pantuflas amarillas. A encender la radio para no escuchar tu silencio absoluto. A la negación de compartir la cama solo conmigo. A encontrar los cajones ordenados, la mesita de luz sin tu bailarina.
Temor llanamente a perderte.
Cuando siento que pretendes mirar más allá de lo que quiero mostrarte bajo la mirada, busco algo que no perdí y te distraigo y ataco.
Ataco a tus ojos buscando tus secretos, tus temores. Pretendiendo así, saber si vos no te queres perder de mi.