miércoles, 4 de junio de 2008

Una mañana como ninguna


Hubo una mañana , de la que guardo su entera figura,
Una noche que paso en cámara lenta, y un sol que salio a la misma hora
pero para mi, tardo más que nunca.
Existe un nacer de día , al que le quise detener las horas,
abrazar cada segundo tironear de la cuerda anudar las manecillas del reloj
que dieran siempre las diez de la mañana.
Apresurado por salir a buscarte, encontrarte, mirarte, desearte, callarte, amarte,
abrasarte dejando mis manos marcadas en tu espalda,
mis labios impresos en los tuyos.
Compartir un ascensor, una risa envuelta en besos,
Una puerta que se abre, que nos encierra y nos apresa entre cuatro paredes
Una mirada larga y sostenida, palabras que molestan, manos que no alcanzan
Una mañana en la que te guarde para siempre, te ame como nunca, y recuerdo como ninguna.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Le tengo un miedo absurdo a vivir un momento como ése, y querer detener el tiempo y que no sea posible... o querer retener a alguien y que sea imposible.

Un abrazo y gracias por pasar.
Siempre es un gusto ver tu bolígrafo en mi blog.

Azul dijo...

HOLA... PASE Y VEA LO QUE LE DEJE EN MI BLOG...jajjaja... se lo merece...
besote grande... que frio pa chomba como decis vos!